Basada en 1 Samuel 31 y 2 Samuel 1:1-17
En la clase de hoy el tema se basará en el libro de 1 Samuel 31 y 2 Samuel 1, veremos como muere Saúl y sus hijos, entre los que se encontraba Jonatán. Aunque Saúl fue un hombre que al principio buscaba de Dios, se desvió siendo rebelde a las órdenes que Dios le daba; por ello fue desechado y muerto en tristeza y aún peor, por su propia mano. Al enterarse David de la noticia, él y los que con él estaban se entristecieron en gran manera, pues tan bien sabían que el pueblo de Israel había sido derrotado. Los puntos y actividades para la clase son las siguientes:
* NOTA: La historia presentada a continuación se encuentra basada y sustentada en la biblia versión Reina Valera 1960, algunos textos están escritos tal y como se encuentra en ella; otros, en lo que respecta a su narración, fueron adaptados para la compresión de los niños, teniendo cuidado de no introducir encubiertamente herejías destructoras, como lo dice en 2 Pedro 2:1 "Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros falsos maestros, que introducirán encubiertamente herejías destructoras, y aun negarán al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismos destrucción repentina."
Cuando David y sus hombres regresaron a Siclag se dieron cuenta que los de Amalec habían prendido fuego al pueblo. Y se habían llevado cautivas a las mujeres y todo lo que se encontraba ahí; al ver todo esto David y sus hombres lloraron, hasta que no tuvieron fuerzas. Y la familia de David también había sido llevada cautiva. 1 Samuel 30:1-5
David se angustió mucho, porque escuchaba que el pueblo quería apedrearlo, pues todos estaban muy angustiados por sus familiares; pero David se fortaleció en Jehová su Dios. Y David consultó a Jehová, diciendo: ¿Perseguiré a los amalecitas? ¿podré alcanzarlos? Y Jehová le dijo: Síguelos, porque los alcanzarás, y librarás a los cautivos. 1 Samuel 30:6-8
Se fue David y los seiscientos hombres, y llegaron hasta el torrente de Besor, donde se quedaron algunos. Y siguió el camino con cuatrocientos hombres; porque los otros doscientos se quedaron cansados porque no pudieron pasar el torrente de Besor. 1 Samuel 30:9-10
Cuando llegaron al campo encontraron a un egipcio y lo alimentaron, porque no había comido en tres días y tres noches. Y le dijo David: ¿De dónde eres? Y respondió el joven egipcio: Yo soy siervo de un amalecita, pero mi amo me dejó aquí hace 3 días, porque yo estaba enfermo; pues invadimos y prendimos fuego a Siclag. 1 Samuel 30:11-14
Y le dijo David: ¿Me llevarás a esa tropa? Y él dijo: Júrame por Dios que no me matarás, y no me entregarás en mano de mi amo, y yo te llevaré a esa gente. Lo llevó, y al llegar todos estaban descansando, comiendo y bebiendo y haciendo fiesta, por todo el botín que habían tomado de la tierra de los filisteos y de la tierra de Judá. Y David los hirió y no escapó de ellos ninguno, solo cuatrocientos jóvenes que huyeron en sus camellos. Y libró David todo lo que habían tomado, y libertó a su familia. Todo lo pudo recuperar, también tomó todas las ovejas y el ganado mayor; y la gente decía: Este es el botín de David. 1 Samuel 30:15-20
Llegando David a los doscientos hombres que habían quedado cansados, salieron a recibirlo. Entonces todos los malos y perversos que habían ido con David, les dijeron: Porque no fueron con nosotros, no les daremos del botín que hemos quitado, sino cada uno tome a su familia. Y David dijo: No hagan eso, porque Jehová es el que nos ha entregado todo esto, porque todos merecen un poco, tanto como el que va a la batalla, como el que se queda cuidando las pertenencias; así que, a todos nos tocará partes iguales. Y esa orden se cumple hasta el día de hoy. 1 Samuel 30:21-25
Y cuando David llegó a Siclag, envió parte del botín a los ancianos de Judá, sus amigos, y les dijo: Tomen un presente del botín de los enemigos de Jehová. Y lo envió a todos los lugares en los que David había estado con sus hombres. 1 Samuel 30:26-31
ENSEÑANZA
Fortalecernos en Dios.
Debemos apoyarnos unos a otros, aunque no todos realicen las mismas actividades todos somos valiosos para la obra de Dios.
No busquemos solo nuestro bienestar, compartamos de lo que Dios nos da.
Dios nos ayuda contra nuestros enemigos.
VERSÍCULO
“Encomienda a Jehová tu camino, y confía en él; y él hará.” Salmo 37:5 RVR 1960
GUÍA DE MAESTROS
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ACTIVIDAD
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MANUALIDAD
1. Adorno para colgar de la espada de Saúl.
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